En la actualidad, se describen más de 1000 millones de personas mayores de 60 años, en este artículo trataremos de exponer cuáles son los factores de riesgo más presentes en estas personas y qué hacer para poder disminuirlos.
La 3ª edad es una etapa de la vida que muchas veces resulta difícil de asimilar por la gran cantidad de cambios a nivel fisiológico que se producen, cambios como:
- Afectación del control postural estático y dinámico
- Ralentización de la respuesta muscular
- Reducción en número y tamaño de las fibras musculares
- Pérdida de densidad ósea
- Degeneración discal y de cartílago articular
- Deterioro de la capacidad respiratoria
- Incontinencia urinaria, disfunción eréctil
Estos principales cambios unidos a inactividad, van a ser los responsables de generar las patologías propias de la 3ª edad (sarcopenia, caídas o miedo a caerse, artrosis, osteoporosis, enfermedades cardiovasculares y respiratorias, etc.).
Los tres grandes síndromes o problemas de las personas mayores van a ser, por tanto, las caídas, la fragilidad y la sarcopenia (pérdida de masa muscular).
Por un lado, las caídas estarán generadas por deterioro en el equilibrio y la fuerza (sobre todo en las piernas), mientras que la fragilidad y la sarcopenia estarán causadas por deterioro en la fuerza y en la marcha.
¿Y CUÁL ES LA SOLUCIÓN A ESTOS PROBLEMAS?
¡MUY FÁCIL! ¡¡¡MOVERSE Y HACER EJERCICIO!!!
¿POR QUÉ REALIZAR EJERCICIO?
- Disminuye la tensión arterial y la frecuencia cardíaca
- Reduce el riesgo de mortalidad y discapacidad
- Mejora la salud mental y se asocia con integración social, mejora la ansiedad y la depresión
- Reduce el peso corporal
- Mejora la fuerza muscular
- Disminuye los niveles de colesterol
- Reduce la resistencia a la insulina
- Reduce significativamente el riesgo de caídas (y de las lesiones asociadas a las caídas)
- Reduce la grasa corporal y mejora la composición corporal
Investigaciones recientes han demostrado que la actividad física es efectiva para mejorar y prevenir el deterioro de la función muscular de los miembros inferiores y el estado físico de las personas mayores. Tanto el ejercicio aeróbico como de fuerza-resistencia son efectivos para mejorar el equilibrio, la movilidad y las funciones musculares en edad avanzada.
No obstante, no todo ejercicio físico sirve, hay que tener en cuenta una serie de parámetros:
- Control médico antes de iniciar el plan de ejercicio
- Pautar una actividad física que sea cómoda y agradable para el paciente
- Priorizar larga duración, no alta intensidad (más vale muchos poquitos, que pocos muchos)
- Fomentar el entrenamiento en grupo
- Realizar planes de ejercicio individualizados, en busca de conseguir objetivos propuestos. Importancia de la progresión en los ejercicios.
- Siempre realizar ejercicios con supervisión.
Escrito por Nacho López, Estudiante de ultimo curso del grado de fisioterapia en la Universidad de Valencia, al cual le auguramos un gran futuro como terapeuta.
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